Si llegase finalmente pirihuín a mi destino
soberano o clandestino de no sé por qué,
es posible que me encuentre cavilando con ella,
con ustedes y con alguien que tomando café.
Si a un sosiego tan pueril en esa fábula viril
otro infame lo convierte en silabario caracol,
su sombrilla de insensato nunca túvole ganas:
candoroso adivinar que se aglomera en mí.
Que mañana se haga tarde demasiado tarde
para todos es lo mismo, pues vivir es recordar.
Vulnerable matinata que se queda ciega,
que se inyecta y se diluye y no te gusta ná.
Los que eternamente vamos caminito al sol,
persistentes animales sin cariño ni sonar,
flor inmensamente vivos invadidos de furor:
amarga carga que arde y larga niña a mi panal.
soberano o clandestino de no sé por qué,
es posible que me encuentre cavilando con ella,
con ustedes y con alguien que tomando café.
Si a un sosiego tan pueril en esa fábula viril
otro infame lo convierte en silabario caracol,
su sombrilla de insensato nunca túvole ganas:
candoroso adivinar que se aglomera en mí.
Que mañana se haga tarde demasiado tarde
para todos es lo mismo, pues vivir es recordar.
Vulnerable matinata que se queda ciega,
que se inyecta y se diluye y no te gusta ná.
Los que eternamente vamos caminito al sol,
persistentes animales sin cariño ni sonar,
flor inmensamente vivos invadidos de furor:
amarga carga que arde y larga niña a mi panal.