27 de noviembre de 2008

CDXLVII.- Cheque pal 19



La plata que no tengo,
ayer te la pedí,
mañana la devuelvo:
no sé sobrevivir.

No puedo controlarme.
Mi mundo ya no está,
mi carro, mi dinero,
mi fe, mi voluntad.

No tuve nunca juegos,
ni bici, ni patín,
porque al viejo pascuero
jamás me lo creí.

Me faltan cuatrocientos.
Anótame esto, Juan.
Puchito pal receso.
No tengo ni pal pan.

Amigo no te miento.
Te pago antes de abril.
Repacto el dividendo.
Dejémoslo hasta aquí.

25 de noviembre de 2008

CDXLVI.- Mi caldo pantruca y tu espejo detrás


Yo venía a confesar que fui soberbio,
que huraño, crítico y pedante: fui servil.
Pero te hallé con una paila y cuatro huevos,
llena de risa y ya no supe qué decir.

Cómo extraño tu extraña planicie pradera,
de manto caliche y figura pascual.
Me llora tu cara de adulta cansada
y larvada pereza: no quiero ya más.

Para atar en un ramito de congojas moradas
el esfuerzo que supone tu existencia para mí,
soy la máquina marea caudalosa inesperada
que te mata cuando duermes y que quiere vivir.

22 de noviembre de 2008

CDXLV.- Crimpunidad



Acaso sea mi dolor tan sólo pura insensatez:
quizá no deba justo ahora preocuparme yo tanto,
simular o claudicar y hacer de toda esta podrida
pestilencia, una terrible fantasía sucia y cruel.

Voy a cumplir estrictamente aquel sagrado mandato
que me obliga urgentemente a defender al peatón,
al pequeñuelo que clamando justicia
deposita en mí su grito de tambor retribución.

Pues todo cae ante su viento poderoso,
y los altares imponentes de la Santa Libertad
se desmoronan,
desaparecen ante el dios de la Justicia.


Tan sólo basta que la humilde abuela apunte
con el tirano denunciante de su dedo pavor,
para que toda la conquista libertaria del siglo
muera en honor al cielo virgen de la rosa Dignidad.

Pero ahora debo desistir: decir yo nunca,
amigo nunca realmente te creí...
Mira, lamento haber nutrido de esperanzas
tu sueño noble y celebérrimo de a pie.

Debes saber que la justicia es ciega,
pero se niega al que no quiere ver
y al que pretende levantar su furia canto
precisamente contra el puño del poder.

Yo soy el terco cuasimodo descontento,
el apetito del segmento más común,
pero me niego, me resisto y me defiendo:
porque he nacido enamorado de la Ley.

Soy el que sabe que ante causas justas,
aunque nos manden no se debe obedecer,
pues la verdad tarde o temprano se pronuncia,
y sus palabras son las armas del más digno coronel.

20 de noviembre de 2008

CDXLIV.- Vídima Perícula Planaria



Porque me toca ruca dar y vivir
todo un instante entre la espléndida nación,
una mañana frente al cúmulo del alma amar,
de la magnífica aventura humana.

La que me deja en el doméstico universo
de mi vivir considerando lo posible,
que fue un aroma en el transcurso de su luz,
cigoto mío y personal desiderata.

Fue incubadora, surtidora y pesebre,
árbol aurora y mariposa trinar,
por elegir sin claudicar el brillo cierne:
cuna y pirámide que un día construí.

Yo presentí su piel aprecio como un aura,
cual una mística burbuja ilimitada
de mora pompa que gravita en expansión
y se me aleja, sin remisión.

CDXLIII.- Azul Marino Amarillo


Hay algunas cosas demasiado absurdas:
gente que no entiendo como sigue acá.
Duermen aferrados al poder que nunca
cuando llega el día van a utilizar.

Si te dan la mano nunca te la aprietan,
Si te piden algo, no hay retribución.
Viven con la boca sin soltar la teta
salvo cuando juntos cantan su canción..

“Vendo mi pasado y toda mi destreza;
no me comprometo en lo que no obtendré
algo para mi familia y con la mierda
pago la hipoteca: quedo siempre bien”.

Hacen lo imposible por lograr el brillo
que para su grave cargo sea menester:
lustran sus zapatos con betún amarillo,
ojos amarillos y amarilla la piel.

Yo los llevo tan frecuentemente a cuestas:
manos que mis hombros ya conocen bien.
Son de los que ganan sin lanzar apuesta.
Lloran a la gente cuando temen perder..

“Vendo mi pasado y toda mi destreza;
no me comprometo en lo que no obtendré
algo para mi familia, con la mierda
pago la hipoteca y quedo siempre bien”.

19 de noviembre de 2008

CDXLII.- (Casi) Nunca Más




Estimado Señor Torturado:

Lamento decirle que su denuncia no ha sido acogida.

A pesar de haber contado inicialmente con la aprobación de mis autoridades superiores para perseguir al grupo de desalmados que lo privó de libertad, lo condujo a un cuartel durante la noche, lo sometió a apremios ilegítimos de carácter físico y psicológico durante cinco horas, provocándole heridas que tardaron más de treinta días en sanar, que allanó ilegalmente su morada y su dormitorio, que montó una maquinación para obtener de su parte la confesión de un crimen que no cometió y que proporcionó finalmente antecedentes falsos, que permitieron al Juez decretar su prisión preventiva, medida cautelar que tuvo una duración de varios meses; a pesar de todo ello, tenemos serias dudas de que usted esté diciendo la verdad, aprensiones respecto de su salud mental y consideramos que usted perdió su pieza dentaria casualmente o probablemente a raíz de un mal aseo.

Debo comunicarle por lo mismo que se lo someterá a exámenes psiquiátricos y que el informe médico que consigna la naturaleza, entidad y origen de las lesiones que sufrió está completamente desacreditado y pronto será modificado, a petición de las autoridades máximas de la policía.

Sin otro particular, le saluda atentamente

Cuculí Plop

Dios le guarde

CDXLI.- Puro Tonteando


Yo venía por mi tema.
Pero tiene que esperar.
Si te le cayo el sistema,
juego con el celular.

Puro robo por sorpresa,
puro piratear cidí.
Cardonal no es lo que era,
pero de algo hay que vivir.

Loco préstame a tu hermana.
Es lolita, pero igual.
Legaliz la marihuana.
Cambiaté el vino minal.

Goga te le cae el diente.
No, Pedrito, na que vechhh.
¡Te ponís tan insolente!
Puro colao te voy a hacechhh.

La doctora Moreira puede
arreglarte boca y nariz.
Quedarían el descueve,
pero tiene que morir.

El problema esta justicia.
El problema este país.
Que esa gente te va a misa,
pero nunca va a cumplir.

17 de noviembre de 2008

CDXL.- Lutero Dáctilo


Ángela Mandinga que impone sus leyes
justo en el momento de la consagración,
aparta del arado más liviano a los bueyes,
y mete su cola: no deja más opción.

Habíame jurado el ostracismo más severo,
de esfuerzo y sacrificio por no desfallecer,
tenía mis palmas de espaldas al madero
y tal como el engaño, me ha sido un placer.

Dulce ambrosía que en el cáliz más amargo
fue vértigo y caricia donde había dolor,
fecunda levantó mi vanidad de su letargo,
que enciende krakatoas en la flor de la pasión.

¿Es ella que me mira cual medusa persistente
un sueño perdido que he vuelto a encontrar,
el beso arrepentido, aquella vida diferente
o mi ardiente panacea de instantánea eternidad?

16 de noviembre de 2008

CDXXXIX.- Al menos tú



Yo qué daría por rodearme todo el día
del elemento poderoso de tu voz,
por contenerla en el acuario más solemne,
donde se duerme sumergido lo que es dulce,
lo más amado de las voces humanas.

Atravesar sin escafandra las estrellas,
por un instante, lo rotundo que hay en mí,
y el arrebato de las furias parezca,
donde residas tú, mi herida huella.

Por complacer siquiera a un ala del destino,
ese que un día nos sedujo en la sangre
y fui tu hermano, tu iracundo, tu cobarde,
porque hay naufragios que preservan el candor
y la belleza nos halló por fin,
a mí desnudo, distraído y amante,
toda una tarde conservando el aliento,
en el albur del arrecife de tu música voz,
tu sola voz:
yo qué daría por rodearme de tu voz.

O simplemente por quedarme contigo,
por transitar el arco pálido del mundo
y solamente caminando unidos
cual poseídos por el quicio del silencio.

CDXXXVIII.- Mi torre de papel



La gracia y la aventura está en que nadie te entienda,
que todos se pregunten lo que quieres decir,
como ocurre a cada rato, inevitablemente,
porque digas lo que digas, nadie sabe de ti.

Un pozo muy oscuro se ha cavado en tu mente
y el mar de las palabras no lo alcanza a tocar,
la luz del mediodía apenas llena tu frente
y el agua del decir no se evapora jamás.

Mucha gente dice que escribo incoherencias,
que el lóbulo colgante de la luna, que no hay ciencia.
Yo digo que está bien, que me subyugan los adverbios,
que digo ciertas cosas, muchas veces, pero es cierto.

Si tomo el Ser y Tiempo, lo recorro sin parar
y nunca me detengo por si acaso a meditar.
Y está mi Residencia que leía cuando niño,
como mares poblándose que nunca entendí.

15 de noviembre de 2008

CDXXXVII.- Metro Pieza




El tren que pasa ahora y se detiene
lleva 31 personas en el mismo vagón.
Yo subo cansado y me siento,
conmigo suman justo 32.

Obreros, jubilados, diecinueve adolescentes,
empleados de oficina y diez sansanos,
se duermen apoyando displicentes,
el codo en la ventana y la cabeza en una mano.

Observo en casi todos de soslayo
los ojos que me cuentan hacia dónde van,
qué traen en el bolso y cuánto rato
les falta todavía por llegar.

Si anoto lo que pasa en mi cuaderno,
un niño no me deja de mirar.
Lo malo de este viaje es que va lento.
Lo bueno es que se puede ver el mar.

La voz de un hombre ronco cada cierto tiempo,
nos pide con amable e inopinada discreción
que seamos más amables, que cedamos el asiento
aunque nadie realmente le ha prestado atención.

La gente va quedando paulatinamente atrás
conforme todo avanza y dejan el ferrocarril,
Mi viaje parecía interminable
y casi sin aviso ha llegado a su fin.

14 de noviembre de 2008

CDXXXVI.- Me puse colorao



Anduvo hoy de nuevo tu alegría por aquí.
Su mosto de tormenta trajo un vuelo de cerezas.
Te siento caminar o platicar sin que se vea
la luz de tu presencia cotidiana, que no está.

Permíteme decirte en lo que estoy más claro:
tu magia es la locura que me ha sido fiel.
Desnuda hoy apareces con total descaro
y dejas golosinas con rubor de miel.

La prenda más sublime es lo que llevo dentro.
¡Fantasma que habla quedo pero se oye tan bien!
Tu ruda es el perfume en la floresta y siento
al gnomo allí en el lomo del poeta rey.

¡Qué digno me es tu signo de luciente sutileza!
Es mar, inmenso mar, lo que me va a mojar.
¿Entiendes su pausada y mascarada belleza?
Yo sé que aunque te cante no lo sentirás.

12 de noviembre de 2008

CDXXXV.- Cuento Corto



Despídeme de todos
que no voy a volver:
la historia es una tumba
y mi cantata su réquiem.

Ripio de mujer desagradable:
que son diez años, que se depila,
que está en el baño,
que se congela.

La que escribía para mí,
quedó en el puerto;
la que soñaba nuestra vida,
se marchó.

La primavera que me amaba,
me dio un beso,
pero no quise y anduve preso:
ya me cansó.

Y luego llego hasta la casa insatisfecho.
Me siento frente al dios error de la interfás.
Tengo mi pucho, mi aguardiente, mi despecho.
Lloro mi sombra, mi dolor y mi alquitrán.

10 de noviembre de 2008

CDXXXIV.- Nunca lo pensócrates


Aquellos que castigan a las almas sublimes,
antes las dejan de considerar:
por eso llenan el salón con la mediocre
y perezosa mentirosa multitud.

Lo que les brilla es lo que llevan en el pecho:
su fabulosa risa burda y caporal
que se evapora, aunque la guarden en secreto,
y no la logren comprender jamás.

Dolido cae el que escuchó todo eso,
sobre sus manos y su luz interior,
desnudo y dando al arrecife las alas,
que de sus ojos no se ha vuelto a hablar.

Hay una sola condición urgentemente,
una imperiosa, perentoria y necesaria también:
de liberar a cuantos sean los que viven atados
en oscuras catacumbas que se ocultan en la sien.

No importa que hayan accidentes en la ruta,
ni cuanta gente se detenga para vernos caminar.
En toda copa siempre puede haber licor o cicuta.
Yo me conformo con tener la obligación de soñar.

7 de noviembre de 2008

CDXXXIII.- Arte Poética


Orla fantasía que en un beso efervescente
derriba lentamente aquella fiera realidad
descubierta en nuestra mente como comba prodigiosa
y la pausada voz amena que es un rezo en mi interior.

Me subyuga como péndulo fantasma,
me arrebata quisquillosa con malévola misión
vegetativa,
porque era tango melodioso en acordeón.

Dame un abrazo, vida incógnita maldita,
que considero el espectáculo del mundo,
desde una cámara sumida en mis ojos:
yo te imagino siendo parte de mí.

5 de noviembre de 2008

CDXXXII.- Cálida Fachenda del Toboso


Fiordo desnudo de rumores invisibles,
cubre anegando lo dulce de mi alma,
toca y descubre cual ubre mi boca.
Me seduces y me provocas.

Élitro misterio del que huyó mi padre,
sin jamás abandonarlo de verdad.
Benditas alondras, amantes fecundas
que van a la orilla de mi voluntad,
tomando mi mano sin darme una tregua:
temible es su sebo y me dejo llevar.

Acaso fue la música serena,
acaso fuera noble profesión,
mi casa, mi colchón, mis azucenas,
la muerte caminando tremebunda en mi interior.

Yo surjo desde el émbolo pirata,
que tapa mi linfática marea de opresión,
llorando con dolor mis apetitos,
mi sed eterna, mi amor bonito:
yo soy espíritu y linterna de furiosa vanidad.

4 de noviembre de 2008

CDXXXI.- Eres Tú


Cuando busques al cachorro que no muerde,
hallarás sólo ladrones de antifaz
y ladridos pero nadie que concuerde
plenamente con tu amor y tu amistad.

No te afanes por el día que vendrá,
ni te apenes en la vida, no lamentes
que la gente por la calle sólo está
empeñada en otros planes diferentes.

Porque dicen por ahí que no todo es así,
tan amargo, tan vacío, tan vano.
Hay un amigo de verdad que está siempre junto a ti,
aunque no puedas estrecharle la mano.

Que bien vale conseguir para cantar la pena,
lo que nadie se ha encontrado sin contar con él,
un alimento de energía pura, libre y plena:
el acertijo de tu felicidad.

Y aunque sea pan de pobre, sabe mucho mejor,
al decir con toda el alma ¡Que bueno!
Y parece vino añejo, pero te hace soñar
que su vaso siempre está medio lleno.

2 de noviembre de 2008

CDXXX.- Pan de Dios


Tez que lucirá la vida yerta,
paso de cansada luz amor y convicción,
que va por puentes desde aquí si marcharemos
y lo sigamos por el último cántico,
que sea llamado el sendero mejor.

Y fue de mustio patrón ignoto:
vuelo de pérfido placer remoto y talón,
que es mi canción,
aparatoste que no entiende nadie,
fuego y culote marcado de Pedrito llorón.

Anciana letanía de salmista,
una promesa tan eterna que jamás se cumplirá:
yo, mientras viva se unirá en pos de nosotros,
la gente cándida y sencilla que se para a comulgar.

Nos gusta Cuculí Pop