30 de junio de 2011

DCLXXXVIII.- Un secreto sobre el origen de todos los gritos



Bailan precisamente en el fondo mismo
del resto de los estudiantes todos juntos.

Mi hija detrás de nosotros,
el raro nombre de los seres humanos,
la prisión imposible en que sus jaulas ama al mundo,
lo poderoso y lo imprevisible,
¡Oh, tenebroso lámpara insolente!

¿Quien estuvo con ellos desde el principio?

Aquí lo tenemos.
Es la fuerza al alcance de su mística peregrina y barata.

Vírgen y pueblo,
verruga y dolor,
música persona,
anagrama de los largos y penosos viajes
que no fuese el asesino dédalo y papel.

Por lo menos que no existe
el que no tiene palabras,
que ni siquiera gime,
porque todo es vanidad,
meticulosa vanidad rémora
de tercos fabricantes perezosos,
suma y perseverancia del otoño principio,
dando vueltas interminable vino por ti,
estival de la eterna vejez humana
desconsolada y resurrecta,
química y nación,
madre de todos,
calcinada que yace,
llorando sin abrazos,
desde el inicio lejano de las obras salgo a la calle.

Un día todo comenzó.

Nos gusta Cuculí Pop